Como se suele decir, ¡no todo es de color de rosa! Pero casi 😉
La experiencia Au Pair tiene muchos momentos diferentes donde la Au Pair pasa por estar nerviosa, emocionada, feliz, súper enérgica…
Y otros de tristeza, echar de menos a nuestra familia y amigos, estar agotada o simplemente con la paciencia bajo mínimos.
¿La buena noticia?
Por supuesto, depende de cada Au Pair, pero los momentos de bajón suelen ser menos y los de subidón tan potentes que te hacen recordar esta aventura con una sonrisa.
AVISO: si estás leyendo esto y realmente ves que tu experiencia no te está gustando lo más mínimo, busca qué puede estar ocurriendo para resolverlo.
-
Si se trata de un problema con la familia, cambia a otra.
Hay muchísimas Au Pairs que después de unas semanas o varios meses han hecho rematch y se han ido con otra familia.
Lo habitual es esperar por lo menos entre dos semanas y un mes como periodo de adaptación.
Pero si ves que la cosa no te cuadra por ningún lado, ¡no esperes a que te acabe de encajar! Porque seguramente esa familia sea así siempre y tenga sus costumbres que no van a cambiar.
Si en nuestra vida normal sabemos que no podemos caer bien a todo el mundo y NO PASA NADA, como Au Pair más de lo mismo.
Además, puede que la siguiente familia con la que vayas a convivir sea una maravilla (y tú sin saberlo) 😉
Y ante todo, no pienses que tú tienes la culpa de que la cosa no haya ido bien del todo o que no te has sabido adaptar. Porque claramente, no es así.
Un buen truco para intentar evitar estas situaciones, es hacer el máximo número de preguntas a tu futura host-family. Y no solo por email o whatsapp. Mejor si os podéis ver las caras.
-
Si es que simplemente no estás a gusto en general con estar lejos de casa, cambiar de idioma…
¡NO TE PREOCUPES! Quizá no sea el momento.
O es que directamente, ser Au Pair no es lo tuyo.
La experiencia Au Pair no es algo que solo pasa una vez en la vida o la primera familia con la que haces match, la definitiva.
Conozco Au Pairs que han repetido hasta 5 veces la experiencia. Y otras que a los pocos meses decidieron volver a casa. Porque no les acaba de encajar la experiencia o no era lo que esperaban.
Al final estás en otro país sí, y puedes viajar y conocer gente y aprender un idioma.
Pero tienes que ser realista y consciente de que en tu día a día, la actividad principal va a ser cuidar a los peques, entre 30-40 horas a la semana, ¡qué se dice pronto!
También lo puedes mirar contando las horas libres que te quedan al día jaja ¡todo depende de cómo se mire!
Por supuesto, si necesitas ayuda o tienes dudas sobre este tema y no sabes qué hacer, escríbeme un email o por mensaje directo de Instagram y te ayudaré 🙂