¡Hola Au Pair!
Lo primero aclarar que el programa Au Pair está definido como un intercambio cultural donde la familia se compromete a ofrecer alojamiento, manutención completa y una pequeña paga semanal.
A cambio la Au Pair cuida a sus hijos un número determinado de horas a la semana, aprende y mejora el idioma del país y se integra en la cultura.
Hasta aquí todo correcto.
Al estar considerado programa cultural y no trabajo, no se rige por la normativa habitual de cada país respecto a número de horas o salario mínimo, por ejemplo. Pero como comentaba arriba, sí tiene su propia normativa que tanto familias como Au Pairs deberían cumplir.
¿Qué ocurre entonces con las malas experiencias que viven algunas Au Pairs?
Pues muy fácil, que alguna de las dos partes no lo cumple.
Normalmente las familias, que están en una situación de “superioridad” al ser ellas las que acogen a la Au Pair.
Este incumplimiento de la normativa del programa se suele enfocar en pretender que la tarea principal no sea cuidar de los niños, pero sí en limpiar. O que el número de horas que cuida a los niños exceda las 40-45 horas semanales.
Principalmente estos dos casos.
Y hay muchas Au Pairs que lo acaban haciendo porque les pilla de sorpresa o porque no ven otra alternativa una vez ya están allí y dejan que pase por alto.
¡Y esto no debería ser así!
DOS SOLUCIONES PARA EVITAR ESTOS CASOS:
¡Valorarnos más!
Empecemos por la base.
Siempre (o casi siempre) hay otra alternativa. En este caso, si estás en una situación que no te gusta puedes cambiar y no pasa nada.
No eres peor por ello.
A veces nos exigimos tanto. Ya sabes, el Síndrome del Impostor. Le pasa a otra Au Pair y no dudas ni un segundo, ¿qué no estás contenta con tu host-family o cómo cumplen con el programa Au Pair? Cambia a otra.
Pero entonces te pasa a ti y “uy, quizá en unas semanas cambia” o “no es para tanto” o “me aguanto y ya está”. Porque con todo lo que has vivido hasta estar allí, da miedo echarlo para atrás.
Piensa que ser Au Pair es una experiencia para disfrutar, aprender y conocer.
Es cierto que habrá momentos que no te gusten tanto o que los niños te agoten… Esto también forma parte de la experiencia. Pero no el tener que limpiar más de la cuenta o no tener tiempo para ir a clases de idiomas.
Y así llegamos al segundo punto más importante y protagonista del post:
CONTRATO AU PAIR
La forma más rápida de aclarar todos los puntos del programa con la familia y ver que todos estáis de acuerdo es haciendo con antelación un contrato.
De esta forma quedan claros puntos tan importantes como pocket money, número de horas o tareas a realizar por la Au Pair.
- Las agencias ya te proporcionan toda la información y el contrato que tienes que firmar con los puntos principales acordados con la familia. En este caso, lo llaman Acuerdo de Colaboración o Letter of invitation que firman tanto la Au Pair como la familia.
Además, en caso de que no se cumplan, siempre tienes a la agencia Au Pair como apoyo y soporte para ayudarte a manejar la situación o cambiar de familia.
- En caso de buscar familia por tu cuenta, es súper importante que seas tú quien pida a tu futura host-family que rellene el contrato y acordéis todos los puntos con antelación.
Aquí tienes un descargable del contrato Au Pair en español.
¿Tienes alguna duda más? ¿O quieres compartir tu experiencia?
Escríbeme a info@globalinspair o por DM de Instagram a @globalinspair y podremos charlar un ratito sobre tu aventura Au Pair y responder a todas tus preguntas 🙂